Por fin ha llegado el momento que
todos esperabais: mi primer post.
Contrariamente al resto de
vosotros, y como ya sabéis, mi idilio con el hobby es relativamente reciente.
Cierto es que de jovenzuelo con perilla me dediqué a “pintar” miniaturas de
Fantasy (Altos Elfos ftw) y de 40K (Catachanes), pero no pasó de una veintena
de miniaturas. Ha sido ahora, en mi segundo despertar freak cuando me he puesto
manos a la obra y me he dedicado a pintar. Por ello mis miniaturas, mi técnica
y mis fotos no tienen la calidad del resto de obras que se han presentado y
presentarán en este blog. Lo de las fotos se lo achaco a mi móvil, lo otro, a
mi inexperiencia.
Pero vamos a lo que vamos. Con
todos ustedes, el primer segundo post de miniaturas históricas. Hoy, infantería británica del período tardío de
la Segunda Guerra Mundial.
Contexto
La Segunda Guerra Mundial es uno
de los períodos más atractivos de la historia contemporánea tanto por las
implicaciones para nuestro mundo actual en forma de política (el Estado de
Bienestar o Welfare State se presenta en Reino Unido como contraposición a la
cruenta guerra y penurias para la población y su dedicación absoluta al
esfuerzo de vencer a las fuerzas alemanas, en lo que se conoció como Warfare
State), tecnología (inventos como los cohetes, la energía nuclear, el radar o los
aviones a reacción son hijos del conflicto) o estética (como molan los
uniformes de las SS).
El Imperio Británico fue uno de los poco
países europeos que consiguió detener el poderío militar alemán, antes incluso
de que pudiese tocar tierra en la Pérfida Albión. La Batalla de Inglaterra es
uno de los puntos de inflexión del conflicto y permitió, entre otras cosas, que
las islas británicas sirviesen como base de operaciones para la apertura del
llamado Segundo Frente en Europa, bajo batuta americana.
La relación entre EE.UU y Reino
Unido fue fundamental para que estos últimos pudiesen resistir y, conjuntamente
con la producción de carros de combate y otros artilugios en suelo americano
para ser utilizado por las fuerzas aliadas, también se confeccionaron uniformes
británicos. Y digo esto porque, me baso en los uniformes británicos producidos
en EE.UU para seguir su esquema de color (aunque con mucha libertad), que puede
verse en esta fotografía de época. ¿Qué época? 1943.
Los colorcicos
Para pintar esta miniatura se ha
usado un esquema de colores tierra acordes al período histórico ya que se
trata de miniaturas uniformadas. Lo malo
de pintar este tipo de miniaturas es que, al contrario que las de fantasía, los
esquemas de color vienen algo prefijados y tenemos menos libertad.
He usado colores vallejo: Uniforme Inglés para el… bueno, el
uniforme. Marrón cuero para el rifle y la mochila (un Lee-Enfield de cerrojo,
sin la balloneta calada), Verde Americano (para los complementos), Gris Metalizado
(para las partes metálicas del rifle) y Marrón Caqui (para los cubrebotas). Para la base he utilizado Gris
Neutral (adoquines), Amarillo Caqui (tierra) y Tierra Oscura (para las piedras.
Para la cara he usado Carne Medio (base) Marrón Cuero (contorno ojos) y B/N
para los ojos.
¡Al lío! (o el proceso de pintura)
Lo primero que he hecho ha sido eliminar la base metálica de
los pies de la miniatura para poder colocarla en una base (mi primera “currada)
que ya tenía hecha. Esto se ha hecho a fuerza de cúter y no voy a mentir: ha
costado. La base se ha hecho con tierra y piedras de The Army Painter y con
masilla (quizá demasiado para lo que es, también de TAP). Finalmente y tras la
imprimación en Negro (spray, de Formula P3). La miniatura (se me había
olvidado) es un soldado básico de infantería británica de Bolt Action.
Aplicamos la capa base a toda la miniatura
Hacemos los correspondientes lavados con Flesh Wash de
Formula P3 (carne, tierra y piedras aquí
con un poco de marrón diluído) y Nuln Oil Shade (the GW) para el resto, incluido
los adoquines. Quería dar un aspecto oscuro a la miniatura. Al final me ha
quedado más oscuro de lo que quería pero fallando aprendemos. (Estaba húmeda
cuando se hizo la foto)
Finalmente procedemos a dar las
luces. Para ello hemos realizado una primera luz a pincel seco con el color
base y luego hemos ido escalando estas con un pincel de detalle, bien por capas
(como en el uniforme), bien sólo centrándonos en aquellas partes que sobresalen
más. He dado de 2 a 4 luces. Aquí las primeras:
Lo mejor:
La base me ha gustado mucho. No confiaba en que quedara bien pero me ha
gustado bastante el resultado final.
Lo peor y mejorable:
A parte de las luces que tengo que seguir, la mano
izquierda se me ha quedado algo mongoloide. He intentado que esto no pasase
pero creo que hubiese sido mejor dejarla con menos luces (no por nada sino
porque metí la gamba) y la cara, con el contorno y el lavado de tinta se me ha quedado uno poco cadavérica.
Esto es todo. Ha sido un post largo pero espero que os haya gustado. La próxima
vez os presentaré unos partisanos franceses que pienso empezar para un diorama
así que estos vendrán sin base pero con un esquema de color más alegre (yuju,
resistencia) o al menos, más variado.
PD: Hay una foto descentrada. Culpa del blog que no me deja centrarla.